- ¿Aún me quieres?
+ Como el primer día, ¿qué digo? Más. Te quiero mucho más que el primer día, ya ves, debo de ser masoca. Tú que no me quieres, y yo, sin embargo, cada día te quiero más.
+ ¿Qué?
+ Déjalo, no lo intentes, ya me he acostumbrado, no te preocupes, yo seguiré queriéndote, pero no puedo asegurarte que para cuando quieras volver, yo aún esté.